La mañana de este jueves, mientras pronunciaba un discurso en el Encuentro Nacional de la Pequeña Empresa, convocado por la Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa de Chile (Conapyme), el Presidente Gabriel Boric fue interrumpido por uno de los asistentes al evento.
“Nosotros no venimos con una idea de imponer a toda costa sin importar qué sea lo que pasa”, decía el mandatario, cuando alguien lo interrumpió con el grito “¡¿y tu Constitución?!”, lo que generó la evidente molestia de Boric, quien le exigió en más de una ocasión que tuviera respeto.
El incidente había estado precedido por la intervención del presidente de Conapyme, Rafael Cumsille, quien precisamente en la jornada traspasaba el cargo a Verónica Contreras. Este había realizado una interpelación a los asistentes al encuentro, precisamente sobre lo espetado al Presidente. “¿Ustedes están más preocupados de la Constitución o de la delincuencia?”, le dijo Cumsille al público, para luego instar a ponerse de pie a quienes se inclinaran por la segunda opción.
Tras ello, el público -en presencia del General Director de Carabineros, Ricardo Yáñez-, coreó el himno de la institución policial.
Cumsille y el paro camionero de 1972
A raíz de todo lo anterior, el nombre de Rafael Cumsille se tomó la agenda, y con ello las referencias a su rol en el proceso de desestabilización en contra del Presidente Salvador Allende en los primeros años de la década del ’70, y el posterior golpe de Estado civil-militar.
En una editorial publicada en junio de 2014 de la edición 806 de la Revista Punto Final, su director, el periodista Manuel Cabieses, recordó a Cumsille, entonces presidente de la Confederación del Comercio Detallista, como quien “hace medio siglo, junto con León Vilarín, presidente de los camioneros, formaron la punta de lanza del gremialismo financiado por la CIA para derrocar al Presidente Allende”.
Lo anterior, afirmado en el contexto de la difusión de documentos parcialmente desclasificados por entonces por el gobierno de Estados Unidos, y que confirmaban una vez más la intervención de ese país en el derrocamiento del mandatario socialista, a través del financiamiento a gremios opositores al gobierno de la Unidad Popular.
A través de su cuenta en Twitter, el propio Cumsille se ha referido al paro camionero de octubre de 1972, sosteniendo que este “se originó, entre otras cosas, por el desabastecimiento que provocó colas interminables en todo Chile”, pero obviando completamente la intervención del gobierno norteamericano en esta acción desestabilizadora contra la admnistración de Salvador Allende.
Enviado a prisión
En un artículo publicado también en la Revista Punto Final del 4 de septiembre de 2015, el investigador y autor del libro La historia oculta del régimen militar, Manuel Salazar, profundiza igualmente en el papel que jugó Cumsille en el boicot contra el gobierno de la Unidad Popular en la nota titulada Los camioneros y el golpe del 73.
Salazar recuerda en su texto que a fines de septiembre de 1972, El Mercurio publicó una inserción en la que junto a la firma del líder de los camioneros, León Vilarín; la de Benjamín Matte, por la Sociedad Nacional de Agricultura; y la de Jorge Fontaine, de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), entre otros, estaba la del dirigente del comercio minorista, Rafael Cumsille. “En ella incluyeron una carta al Presidente de la República pidiéndole que pusiera fin a lo que consideraban el ‘asedio económico a la Papelera’ si quería impedir que se iniciara ‘un movimiento de clamor nacional para reponer tan marcada injusticia'”, apunta al respecto el investigador.
En el artículo se detalla que el 13 de octubre, dos días después de que la Confederación de Dueños de Camiones proclamara el carácter indefinido de su paro, la Confederación del Comercio Detallista dirigida por Cumsille se sumó a la movilización.
Cinco días después, el 18 de octubre de 1972 como apunta Manuel Salazar, “el ministro de la Corte de Apelaciones, José Cánovas Robles, envió a la cárcel a Rafael Cumsille, Jorge Martínez, Guillermo Elton y otros dirigentes del comercio por infringir la Ley de Seguridad Interior del Estado”.
“El día 7 de agosto (de 1973) Rafael Cumsille, presidente de la Confederación del Comercio Detallista, llamó al paro nacional de ese sector por la no solución de los problemas del gremio, el desabastecimiento y en apoyo de los camioneros”, añade luego en su artículo el investigador.
