El Consejo de Derechos Humanos de la ONU difundió una resolución este viernes (4/5) una resolución por la cual insta a los países a suspender toda venta de armas a Israel, país que promueve una ofensiva militar en la Franja de Gaza desde octubre pasado, en la cual han muerto más de 33 mil civiles palestinos, incluyendo 14 mil niños.
El documento del organismo de las Naciones Unidas argumenta que la resolución está basada en el temor de que la ofensiva israelí en Gaza pueda ser caracterizada como un “genocidio” contra el pueblo palestino, y que la aplicación de este término para lo que sucede en la región desde octubre es tema de debate internacional vigente en la actualidad.
Esta es la primera resolución adoptada por el Consejo de Derechos Humanos sobre la masacre en curso en la Franja de Gaza. El texto fue presentado por la delegación de Pakistán y aprobado por 28 de los 47 países miembros. Chile fue uno de los países que votó a favor del documento, junto con Brasil, Cuba, México, Bélgica, Finlandia, China y casi todas las naciones árabes y africanas representadas en esa instancia.
Hubo también 6 votos en contra, incluyendo a Estados Unidos, Alemania y Argentina, además de 13 abstenciones, entre las cuales se destacan Francia, India y Japón.
Antes de la votación, el representante de Palestina en la ONU, Ibrahim Mohammed Khraishi, afirmó que “es necesario que todos despierten y pongan fin a este genocidio”. Durante su presentación, el diplomático árabe reclamó que el tiempo que le otorgaran era insuficiente para enumerar todas las atrocidades de la guerra cometidas por Tel Aviv en los últimos seis meses.
Por su parte, el embajador israelí, Meirav Shahar, alegó que “un voto por el sí (a la resolución) es un voto por Hamás. Una votación para legitimar el terrorismo palestino y alentarlo. Una votación para socavar el derecho de Israel a defenderse”. También criticó el hecho de que el grupo palestino Hamás no es citado en la resolución en ningún momento.
Sin embargo, cabe recordar que esa instancia no tiene poder para hacer cumplir lo determinado en el texto. La propia resolución no aclara los medios por el cual se debe imponer la decisión a los países y a la industria bélica.
También cabe destacar que el caso de la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza y la posibilidad de que el caso sea caracterizado como un “genocidio” tramita actualmente en el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya, en una causa promovida por Sudáfrica. En el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, el representante sudafricano, Mxolisi Nkosi, defendió el texto paquistaní, argumentando que “ya no podemos optar por aplicar un sistema paralelo de derecho internacional a Israel, ni ser cómplices para facilitar sus acciones”.