El pasado 20 de agosto se cumplieron dos años de la extradición de Mauricio Hernández Norambuena. En conmemoración a estos hechos, colectividades y organizaciones sociales se reunieron a exigir la liberación del Comandante Ramiro.
Los días previos ya se podían ver en redes sociales más de algún llamado de actividades en la calle. La primera de ellas fue un mitting en el ex Congreso –en la capital- en que un grupo de organizaciones sociales se reunieron a las afueras del edificio. “Estamos acá para conmemorar este día oprobioso, este día terrible en que nuestro hermano Ramiro ha llegado a las cárceles para vivir un aislamiento total de máxima seguridad que lleva dos años. Fue trasladado a Rancagua y sigue en las mismas condiciones, calificada por el colegio médico como tortura permanente”, declaró una miembro del Comité de Amigos y Familiares de Rodriguistas caídos.
En la misma acción, Francisca Fernández, antropóloga del Movimiento por el Agua y los Territorios, fue enfática en señalar que “entendemos que lo que se ha iniciado desde el 18 de octubre es un camino que trazaron luchadoras y luchadores. Es un camino por derribar esta práctica neoliberal y capitalista que nos tiene en absoluta precarización. Le debemos la libertad al comandante Ramiro, es parte emblemática de la lucha contra la dictadura cívico militar y contra la lucha de la extensión de las malas prácticas neoliberalizadoras”.
Continuó diciendo que como organización tienen la claridad de que hoy la cárcel sigue siendo un lugar de segmentación y clasismo. Eso es la prisión política, cuando se castiga una forma de pensar, de actuar. “Por lo mismo, es que entonces reivindicamos la condición de Mauricio Hernández de prisionero político y exigimos a los movimientos sociales y a las distintas autoridades la libertad para comandante Ramiro ¡ya!”
En la toma del Instituto Nacional de Derechos Humanos, que ya cumple más de un mes y medio, también realizó una actividad de solidaridad y denuncia. Un espacio radial en repudio al aislamiento de Mauricio Hernández Norambuena en el que participaron Comité por la Libertad de Ramiro, 81 razones, Comité Ex Cuartel Borgoño, abogados de presos de la revuelta y Familia de Cristian Valdebenito.
En la misma se encontraba Jaime Castillo Petruzzi, quien manifestó que Mauricio Hernández “representa la ética y la consecuencia revolucionaria estando en el lugar donde él esté. Hoy se cumplen dos años, lo tuvieron aislado en la cárcel se Santiago, se lo han llevado a Rancagua, sigue aislado a pesar de que ha tenido leves mejorías en su vida cotidiana, que no dejan de ser importante para los presos. Una media hora más de sol, una visita más con la cual poder compartir, mirar los pajaritos, los arbolitos, la gente pasar es un regalo de la vida”.
Continuó diciendo que eso “es al mismo tiempo una reafirmación de que el estar vivos nos hace seguir adelante con nuestro compromiso, con nuestra política de sembrar futuro, de sembrar rebeldía, se sembrar rebelión. Porque eso es lo que es el compañero Ramiro para todos nosotros y por eso lo admiramos y por eso lo respetamos y apoyamos en todo lo que sea posible y todo lo que esté al alcance de nuestras fuerzas”.
Por último, el ex preso político añadió que “el compañero es uno de los compañeros sobrevivientes más destacados de tod esa lucha contra la tiranía en el país, compañero que desde esa época tuvo un compromiso inclaudicable por la lucha de nuestro pueblo,por la liberación total, por el enfrentamiento total al capitalismo. Las acciones en las que participó el compañero, particularmente en la ejecución política del señor Guzmán, ha sido motivo fundamental por el cual, hasta el día de hoy, el Estado chileno y la UDI particularmente, mantienen a nuestro compañero en prisión bajo estas condiciones tan estrictas y absolutamente inhumanas y condenables”.
En el mismo contexto, es que a las 18:00 horas se realizó una convocatoria en la emblemática Plaza de la Dignidad, en que la consigna era, al igual que en las demás acciones, el fin al aislamiento de Mauricio Hernández Norambuena y la libertad sin condiciones de todos los presos políticos. Justo en el centro, en el muro levantado por el gobierno de Sebastián Piñera que rodea el lugar donde se encontraba la estatua del general Baquedano, se pegó un lienzo: “Ramiro dos años, fin al aislamiento, libertad a los presos políticos”, además de otros que fueron desplegados en el lugar, en los cuales se repetía “¡Gendarmería tortura! ¡Fin al aislamiento carcelario!”.
Por su parte, en el Cerro Esperanza en Valparaíso, lugar donde Ramiro vivió parte de su adolescencia, no quiso estar ausente. La jornada de este sábado se pintará un mural en su nombre. Previamente, se realizaron acciones de propaganda con el rostro de Mauricio y algunas consignas: “seguiremos luchando contra el aislamiento de Ramiro, preso político, particularmente, hoy mediante esta pequeña intervención de propaganda, tu cerro te saluda”, manifestaron algunos participantes de la acción.