Según informó el Diario Austral de Temuco, el celular de Martín Pradenas jamás fue destruido, sino que fue puesto en venta en el mercado informal. Esto, con la idea de que la justicia no contara con antecedentes claves para su imputación.
Este 25 de febrero se conoció que la Policía de Investigaciones dio finalmente con el celular de Martín Pradenas, clave para la investigación en su contra. El aparato estaba en manos de una mujer del sector de Pedro de Valdivia, en Temuco, quien afirmó que lo compró en el comercio informal. Esto, en información replicada por Emol.
El hallazgo permitió que la Fiscalía de Temuco pidiera una extensión del plazo para investigar. Situación que desembocó en que ahora el Ministerio Público contará con 120 días más para hacer las diligencias investigativas necesarias.
De manera inicial, la madre de Pradenas declaró haber destruido el celular. Sin embargo, la PDI desde el comienzo monitoreó el correo vinculado al dispositivo. Por lo mismo, la policía logró conocer su ubicación apenas fuera encendido. Hecho que terminó con la visita a esta mujer.
Actualmente, el joven está en prisión preventiva y la fiscalía lo investiga por más de un caso de abuso. Ya que, además de ser el principal apuntado por el suicidio de Antonia Barra producto de una violación, se le acusa a por otros seis casos de violencia sexual contra mujeres.
En el marco del caso, la familia Barra también ha llamado a las autoridades a buscar justicia para Antonia y otras mujeres. Aquello, a través de un proyecto de ley impulsado por grupos feministas en Temuco del que no se ha tenido mayores noticias. “Que salga pronto, no sólo en beneficio de Antonia, sino para todas las chicas que han sufrido“, dijo en su minuto Marcela Barra, la madre de Antonia.