La ciudadanía en general, medios de comunicación, dirigentes políticos y líderes de opinión, incluyendo diversas aliadas de nuestra causa, han expresado preocupantes expresiones que refuerzan el estigma y la discriminación social hacia las mujeres trabajadoras sexuales a través de términos como “asqueroso”, “indignante”, “aberrante”, “falta de elegancia” y “terroristas prostituyentes”, entre muchas otros, que no se leen solo como rechazo legítimo a la movilización de los camioneros, que nosotras también criticamos, sino como expresiones de infortunado estigma, discriminación y desinformación sobre el trabajo sexual en Chile, actividad no regulada por la ley pero sí perseguida social, policial e institucionalmente.
En medio del paro de camioneros que afecta a toda la población en tiempos de grave e incierta crisis sanitaria, Fundación Margen de Apoyo y Promoción de la Mujer, integrante de la Red de Mujeres Trabajadoras Sexuales de Latinoamérica y el Caribe, REDTRASEX, somos testigos no solo de la transgresión del Estado de Derecho en nuestro país, sino que también de la extrema vulneración de los derechos de las mujeres trabajadoras sexuales que han sido violentamente expuestas en una controvertida manifestación nocturna de choferes en paro.
La ciudadanía en general, medios de comunicación, dirigentes políticos y líderes de opinión, incluyendo diversas aliadas de nuestra causa, han expresado preocupantes expresiones que refuerzan el estigma y la discriminación social hacia las mujeres trabajadoras sexuales a través de términos como “asqueroso”, “indignante”, “aberrante”, “falta de elegancia” y “terroristas prostituyentes”, entre muchas otros, que no se leen solo como rechazo legítimo a la movilización de los camioneros, que nosotras también criticamos, sino como expresiones de infortunado estigma, discriminación y desinformación sobre el trabajo sexual en Chile, actividad no regulada por la ley pero sí perseguida social, policial e institucionalmente.
Durante estos preocupantes meses de pandemia nacional e internacional las mujeres trabajadoras sexuales hemos desplegado todas nuestras fuerzas para ayudar a las compañeras más desvalidas y precarizadas, muchas de ellas jefas de hogar y madres de familia, realizando campañas de solidaridad, entregando alimentos y útiles de aseo personal en tiempos donde el Estado de Chile se hace presente solo para reprimir y excluir pero no para dignificar y reconocer derechos laborales.
Las mujeres trabajadoras sexuales no somos cómplices de manifestaciones violentas e injustas como el paro de camioneros, sino un aporte a las incansables luchas por derechos laborales, sociales y sexuales, representando una activa contribución a las urgentes políticas de salud sexual en Chile. Lamentamos vernos expuestas –una vez más- al escarnio público. No somos objetos, ni motivos para las burlas, somos ciudadanas con derechos. Hace días fue a través de la televisión donde animadores y periodistas no dudaron en burlarse de nosotras debido a un operativo policial en contra de lugares donde se ejerce el trabajo sexual y ahora en la exposición pública de mujeres trabajadoras sexuales que han sido llamadas “prostitutas” y “rameras”.
Manifestamos solidaridad con las trabajadoras expuestas a la discriminación social e invitamos a la ciudadanía a informarse más integralmente sobre el trabajo sexual y a los medios de comunicación a entregar información que no promueva prejuicios y estigmas sobre el trabajo sexual en Chile.
Fundación Margen de Apoyo y Promoción de la Mujer