Este martes se realizará la esperada cumbre de la CELAC (Comunidad de Estados Latino Americanos y Caribeños). La ciudad de Buenos Aires será la sede de la séptima edición de este certamen, que contará con la presencia del mandatario chileno Gabriel Boric, quien tratará de fortalecer las relaciones con uno de los gigantes del continente, como es Brasil.
Ante la ausencia del mexicano Andrés Manuel López Obrador, el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva llega a la capital argentina como el gran protagonista del evento, incluso porque esta edición marca el regreso de Brasil a esta organización creada en 2010.
En aquel entonces la mayoría de las naciones latinoamericanas estaban gobernadas por gobiernos de izquierda o de centro izquierda, y fue iniciativa de los mandatarios Hugo Chávez (Venezuela), Cristina Kirchner (Argentina) y el mismo Lula impulsar un nuevo organismo de integración sin la presencia de los Estados Unidos; situación que incomoda a muchos países en la OEA (Organización de los Estados Americano), que termina funcionando como una instancia de imposición de los intereses de Washington sobre la región.
De hecho, la CELAC pasará a tener nuevamente 33 miembros este martes, cuando Lula da Silva formalizará el regreso de Brasil al organismo; el gigante sudamericano se había retirado en 2020 por decisión del entonces Presidente Jair Bolsonaro. La comunidad también no cuenta con la presencia de Estados Unidos y Canadá, aunque sí están representadas Cuba y Nicaragua. Además, Venezuela contará con el Presidente constitucional de ese país, Nicolás Maduro.
En la OEA están presentes Washington y Ottawa, mientras que La Habana y Managua están afuera, y Caracas está representada por un embajador designado por el sector más radical de la oposición, liderado por Juan Guaidó.
Se espera que Boric pueda realizar una reunión bilateral con Lula da Silva, aunque también habrá citas con dos aliados más cercanos, como son el mandatario colombiano Gustavo Petro y el canciller mexicano Marcelo Ebrard, quien representará a su país en el evento. Por supuesto, también habrá una bilateral con el mandatario anfitrión, el argentino Alberto Fernández.
Además de López Obrador, otra ausencia llamativa será la de Dina Boluarte, Presidenta del Perú, país que vive una profunda crisis política desde la destitución del mandatario Pedro Castillo el pasado 7 de diciembre. Las organizaciones sociales del vecino país han realizado seguidas protestas exigiendo la realización de nuevas elecciones generales y la convocatoria a una Asamblea Constituyente.
