Entre el 5 y el 19 de noviembre el Centro de Investigación Teatro La Peste -agrupación con 22 años de ininterrumpida trayectoria- estrenará en Valparaíso y Santiago su obra FIN, un montaje que a partir de la problemática de la violencia policial de Carabineros ficciona respecto al encuentro de un grupo de personas privadas momentáneamente de su libertad arriba de un carro policial.
Serán cinco funciones en total, todas en noviembre, comenzando por la del sábado 5 (19:00 horas) y domingo 6 (16:00 y 19:00 horas) en el Parque Cultural de Valparaíso (Cárcel 471), para luego trasladarse a la capital, donde el 17, 18 y 19 del mismo mes, a las 20:00 horas, la obra será exhibida en el Teatro La Memoria (Bellavista 0503, Metro Salvador), espacio dirigido por el reconocido actor Alfredo Castro.
FIN -obra que viene a cerrar la llamada Trilogía de la Catástrofe, formada también por los montajes Error (2015) y Feroz (2018), dirigidos por Danilo Llanos- cuenta con el financiamiento del Fondo de las Artes Escénicas Creación y Producción de Montajes Escénicos / Trayectoria, de la Convocatoria 2022.
“¿Qué relaciones se pueden inaugurar en un espacio atiborrado de violencia?”, es una de las interrogantes que plantea esta puesta en escena a cargo del renombrado y prolífico director Danilo Llanos, con dramaturgia de la destacada creadora Isidora Stevenson (Campo, Hilda Peña, El Nudo y Acciones Inconclusas) y cuyo elenco está formado por Ximena Flores, Daniella Misle, Gabriela Arancibia, Katty López y Martina Ibáñez.
Ellas encarnan a Luisa, quien lidera un negocio de microtráfico en una población chilena; a la sargento Ampuero, funcionaria de Carabineros con una hoja de vida intachable; a Mónica, profesora cuyo hijo fue dejado en una silla de ruedas tras recibir el chorro de un carro lanza aguas de la policía; a Cinthya, una vendedora ambulante cuyo hermano murió en el incendio de la cárcel de San Miguel; y a la “cabra chica”, una malabarista menor de edad que creció en un centro del SENAME y hoy debe otorgar servicios sexuales a algunos carabineros para poder trabajar en la calle.
Asfixia, extravío, incertezas, inseguridad y angustia son algunos de los sentimientos que recorren a estas cuatro detenidas en esta suerte de “tren que avanza en la oscuridad de la noche”, como es descrito en el montaje el carro policial que las traslada, y donde la hostilidad y la crueldad campean no solo entre las apresadas y su carcelera, sino que también entre las propias privadas de libertad debido a las condiciones inhumanas en que enfrentan esta situación.
“LA PUESTA EN ESCENA TIENE UN CARÁCTER PROVOCADOR”
El director Danilo Llanos explica que FIN es un proyecto que nace como idea el año 2018, y que tiene la particularidad de “contar algo en espacios abyectos, donde la única posibilidad de estar ahí es habitándolos o imaginándolos, y llevándolos hasta el paroxismo”. “Es un ejercicio desesperado de imaginar qué ocurre ahí adentro”, explica, aludiendo con ello también a las anteriores obras que forman parte de la trilogía: Error, un espacio de interrogación a un cuerpo en depresión y en un estado mental límite, y Feroz, situada en la realidad de los niños y adolescentes que viven en centros como los del SENAME.
“Es interesante abordar el lugar de la violencia ejercida por la autoridad como un fenómeno recurrente; una violencia contra los cuerpos del margen, y que es parte de un loop eterno que tenemos como país”, profundiza Llanos. En ese sentido, destaca que “la puesta en escena tiene un carácter provocador, porque insta al público a entrar en esa imaginación de lo que ocurre adentro del carro, ante la imposibilidad de estar ahí y la desesperación de querer saber qué es lo que pasa verdaderamente”.
Por su parte, la dramaturga Isidora Stevenson explica que para la escritura de FIN se ha alimentado “de nuestra realidad, algo que yo nombro como escribir con la ventana abierta, dejar que permee el afuera, y nuestra historia reciente está marcada por la violencia policial”.
Sin perjuicio de ello, Stevenson enfatiza que “más que centrarme en la violencia policial -que evidentemente es el paisaje de fondo y lo que resuena de manera permanente en la obra-, me enfoqué en intentar perfilar estas voces, a estas mujeres, que están en ese contexto; cada una con sus propias historias y discursos”.
Junto con ello, releva el hecho de que la dramaturgia de FIN igualmente “deja un espacio de incógnita, de opacidad, de no tener que dar por sabido todo sobre los personajes, sino que permite que las líneas que va trazando el texto y las actrices con sus cuerpos, sus voces y sus actuaciones, lo vayan completando”.
En ese sentido, la actriz Katty López destaca que participar de FIN ha implicado “un desafío, porque nos instala actoralmente desde un lugar en el que no estamos acostumbradas a trabajar”. “Habitualmente, el trabajo de los actores y las actrices se instala desde la observación total del cuerpo que está en escena, y en este caso es algo super diferente. Hay que estar atentas a otros estímulos, potenciar ciertos sentidos que no se trabajan tan conscientemente”, explica.
Junto con ello, la actriz releva igualmente que “la relación que se instala entre nosotras es super distinta, nuestra forma de relacionarnos está super vinculada a algo que no es muy visible, que está siempre como velado, como en una nebulosa, en donde hay mucho ruido y donde comunicarse es algo muy complejo. Y eso hace que en nuestro trabajo deba existir una concentración gigante; una verdad escénica, pero en torno a este nuevo mundo que se instala”.
Las entradas para la obra FIN tienen un costo de $4.000 y 2 x $7.000 en el caso de Valparaíso, mientras que en Santiago este será de $8.000 general, $5.000 estudiantes y adultos mayores, y $4.000 los jueves populares.