En el contexto de la conmemoración de los 35 años del atentado a Augusto Pinochet, la facción de la barra colocolina que otorgó la membresía activa tiene la intención de hacerle llegar encomiendas y continuar el trabajo de propaganda en torno a la libertad de “Ramiro”, como una prolongación de lo que hacen en el estadio y en la calle.
La barra antifascista de Colo-Colo comenzó una membresía activa con Mauricio Hernández Norambuena, haciéndolo socio del club. Con una credencial conmemorativa que hace alusión a los 30 años desde que el plantel masculino de Colo-Colo ganó la Copa Libertadores en 1991, una parte de la barra del equipo deportivo quiso manifestar solidaridad con el prisionero político.
“Para nosotras y nosotros como Antifascistas de la Garra Blanca, Mauricio Hernández Norambuena -o “Ramiro”, como también lo conocemos- representa un pasado y un presente que nos identifica. Eso fue lo que nos motivó a darle está membresía, una membresía activa. Nosotros, al igual que él, somos colocolinos y de izquierda”, declara una integrante de la facción.
La idea de una membresía activa es poder hacerle llegar libros, stickers, prendas del equipo y la misma credencial. Además, han hecho propaganda exigiendo la libertad de “Ramiro” e intervenciones en el estadio proclamando su pronta liberación. “Hemos hecho intervenciones en el estadio y en la calle exigiendo su libertad y denunciando las condiciones inhumanas en las que se encuentra recluido”, menciona la barrista.
“Hemos tenido un intercambio nutrido con él. En su momento nos hizo llegar una carta donde nos contó que era colocolino”, narra la hincha antifascista, a propósito de las intervenciones callejeras que habían realizado. “Porque más allá de rumores, no teníamos la afirmación, así que nada mejor que haya sido del puño y letra de él, agrega.
En cuanto a las encomiendas y la llegada de la credencial a manos de Mauricio, la hinchada explica que ha sido complejo hacerlas llegar debido a las condiciones carcelarias en las que se encuentra, pero que se están haciendo las gestiones para que puedan entrar al recinto.
“Nosotras y nosotros somos hijos de la lucha contra el fascismo y la mercantilización de la vida, por eso hoy asumimos la responsabilidad de seguir luchando contra el legado de Pinochet y lo hacemos desde donde nos sentimos mejor posicionados, desde el fútbol. Nos sentimos honrados de poder reivindicar la memoria de Mauricio estando él vivo, porque es parte del legado que queremos traspasar: la convicción de luchar por una vida más justa para el pueblo”, concluye la socia colocolina.