Descartando la opción de acudir al Tribunal Constitucional, desde La Moneda se determinó vetar el proyecto de ley que prohíbe el corte de servicios básicos en pandemia y posterga el pago de deudas en ciertos casos. La oposición acusa defensa de intereses de los empresarios.
Desde el 11 de junio que la iniciativa -ya aprobada por el Congreso- que postergaba la suspensión de servicios básicos por no pago se encontraba a la espera de la promulgación del Ejecutivo. Sin embargo, desde La Moneda arremetieron acusando al proyecto de inadmisible.
Por este motivo, el Gobierno determinó aplicar el veto presidencial y reingresar la iniciativa al parlamento, lo que generó duras críticas por parte de la oposición.
“No se entiende que el Gobierno esté pensando en vetar el proyecto de servicios básicos. Cuando la ciudadanía requiere ayuda, no le podemos cortar la luz, el agua, el gas o el internet en un minuto en que todos y todas debemos estar en nuestros hogares”, señaló la jefa de bancada de senadores DC, Ximena Rincón, quien catalogó como un “error” la opción presidencial.
La información fue publicada por Pulso que, de acuerdo a algunos borradores del Ministerio Secretaría General de la Presidencia a los que pudo acceder, el veto contemplaría rebajar el universo de beneficiarios del proyecto y eliminar la obligatoriedad de que las empresas de telecomunicaciones podrán ofrecer planes solidarios gratuitos a sus clientes finales.
Desde el oficialismo comentaron que el veto “era una de las posibilidades”, como admitió el presidente de RN Mario Desbordes a ADN Radio.
El vicepresidente de la Cámara en tanto, Francisco Undurraga, manifestó su apoyo a la determinación del ejecutivo, señalando en Radio Universo que “Nos opusimos al proyecto, consideramos que tenía vicios de inconstitucionalidad, y en lo personal por ese motivo lo voté en contra”.