La Democracia Cristiana (DC), uno de los partidos tradicionales del país y eje de lo que fueron los pactos de centro izquierda como la Concertación y Nueva Mayoría, tuvo un estrepitoso fracaso en las elecciones. ¿Estamos frente a los últimos días de la falange?
La Democracia Cristiana, otrora maquinaria partidista que movilizaba electores y que logró llevar a dos de sus militantes a la presidencia de la República durante la transición en los noventa (Patricio Aylwin y Eduardo Frei), hoy se encuentra en una profunda crisis tras los resultados en las recientes elecciones.
De los 155 integrantes que debían elegirse, la DC presentó 48 candidatos y obtuvo solo dos constituyentes en la Lista del Apruebo: su actual presidente Fuad Chahín, y Cristián Viera. De esta manera, la falange se transformó en una colectividad casi irrelevante en la redacción de la nueva Constitución.
Tras estos pésimos resultados, la Junta Nacional de la DC debía reunirse este lunes para analizar los resultados electorales y ratificar la candidatura presidencial de la senadora Ximena Rincón, pero tras la dura caída, aparecieron voces que llamaron a suspender la cita.
La decisión ocurre tras el “terremoto político” provocado por la elección del fin de semana. Además, en una pugna interna debido al repunte en las encuestas de la senadora Yasna Provoste (por sobre Rincón), que aparece como la figura política mejor evaluada del país. La cita falangista se realizará mañana martes, y la inscripción de las primarias debe realizarse el miércoles.
Al respecto, el diputado Gabriel Silber fue uno de los que analizó duramente la derrota de la DC y pidió que no se realice la Junta Nacional. “Hablemos de la palabra derrota con mayúsculas y tal vez, por qué no, la crisis del sistema político tradicional”, afirmó el legislador, muy crítico del desempeño de su partido en la Convención Constituyente.
Por lo mismo, pidió que se suspenda la Junta Nacional para no enfrentar a grupo o sectores. “El chaparrón electoral que sufrimos el día de hoy fue grave, como que estamos en la línea flotación”, explicó.
Quien también se refirió a la situación de la DC fue Claudio Orrego, quien irá a segunda vuelta con Karina Oliva (FA) para el puesto de gobernador regional en la RM. “Hay un castigo a una forma de hacer política que se entiende muy de oficina, de pelea y poco contacto con la ciudadanía”, manifestó el exministro.
