Felipe Cembrano es el nombre del fiscal de Las Condes que se encargó de “perseguir” sin condenar a ninguno de los denunciados por violación y abusos sexuales reiterados, uno de ellos heredero del Grupo Said, quienes además compartieron la defensa de los mismos reconocidos abogados penalistas.
Este lunes El Mostrador dio a conocer un segundo caso de abuso sexual de un integrante de una familia “poderosa” chilena que, tras ser tramitado en la Fiscalía de Las Condes, quedó en la impunidad.
El 25 de febrero pasado, ese mismo medio había informado de lo ocurrido con Juan Cristóbal Said, ex alumno del Colegio San Benito de Vitacura e hijo de Salvador Said, quien encabeza el importante grupo económico chileno que lleva ese apellido (Parque Arauco, Embotelladora Andina, Scotiabank). El heredero había sido querellado por el delito de violación por un hecho ocurrido en octubre de 2018 en una fiesta en su casa, donde el universitario habría violado a la también estudiante universitaria de iniciales A.Z.V.
La causa terminó finalmente en febrero de este año con la solicitud de la fiscalía de una suspensión condicional del procedimiento por un delito menor, de abuso sexual, con la condición de que el imputado se sometiera a un tratamiento para aprender a “controlar sus impulsos”.
Dichas acciones que favorecieron al acusado fueron llevadas a cabo por el fiscal de la Fiscalía Local de Las Condes, Felipe Cembrano, y aceptadas por ambas partes del caso y por Rodrigo González-Fuentes, juez del 4° Juzgado de Garantía.
Según lo que detalla El Mostrador, tras dos años de investigación, la causa nunca fue formalizada y nunca se citó a declarar a Juan Cristóbal Said. La nota del medio destaca la importancia de que el acusado fuera defendido por los conocidos abogados penalistas Hugo Rivera y Sergio Bunger, y por la aparición en escena de un “conocido ‘mediador’ de alto nivel”, estrategia ocupada cuando “los que están en problemas son personas con mucho dinero o poder”: el abogado Darío Calderón, conocido por algunos como el “Conde Negro“.
El nuevo caso
En el caso dado a conocer hoy por El Mostrador, el denunciado por abuso sexual reiterado es un joven estudiante de iniciales L.A.P., de 19 años en la actualidad, quien es primo hermano del mencionado Juan Crstóbal Said y también ex alumno del Colegio San Benito de Vitacura.
La acusación señala que L.A.P. habría cometido los abusos hace tres años, cuando tenía 16, contra su pequeña media hermana, de iniciales F.O.P., de 6 años al momento de los hechos.
Pero el parentesco con Said y el que hayan compartido el mismo colegio no es lo único en común entre ambos. El persecutor de esta última causa también fue el fiscal de Delitos Sexuales Felipe Cembrano y los abogados defensores fueron igualmente Hugo Rivera y Sergio Bunger.
En ese sentido, el medio apunta que “es sabido, por los abogados que tramitan ante la Fiscalía de Las Condes, que el fiscal Cembrano trabaja sus casos ‘delicados’ estrechamente con su jefe máximo, el fiscal regional Manuel Guerra, entendiéndose por casos ‘delicados’ aquellos donde la víctima o victimario, o sus padres o hijos, o sus abogados, son personas conocidas o ‘poderosas'”.
Cabe recordar que Manuel Guerra es el mismo persecutor que argumentó no tener los elementos necesarios para formalizar a Sebastián Piñera en el marco de la indagatoria por el bullado caso Exalmar.
“Nos señalaron (en el colegio de la niña víctima, The Grange School) que durante la mañana del 19 de octubre (de 2018) ella se había puesto a llorar intensamente, por lo que una de sus profesoras le había preguntado si había algo que les quisiera contar y mi hija les dijo que su hermano grande la tocaba sus partes privadas. La profesora le preguntó cuáles eran las partes privadas que él le tocaba, y la niña le dijo: el potito. Las pechugas, las mini pechugas y la vagina”, es parte de lo que se relata en la querella criminal que presentó la mamá de la niña y que reprodujo El Mostrador.
La causa estuvo paralizada por dos años, aún cuando la madre de la víctima reunió abundantes antecedentes sobre lo ocurrido, y solo vino a ser reactivada luego de que la Defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, enviara un rotundo oficio a la Fiscalía de Las Condes, la que decidió activarla en octubre de 2020, formalizando al acusado como autor del delito de abusos sexuales reiterados, en grado de consumado.
¿Qué ocurrió finalmente?: tras los 60 días de investigación, “por razones no esclarecidas y difíciles de entender”, apunta El Mostrador, la causa dio un inesperado giro y el Ministerio Público comunicó formalmente su decisión de no perseverar en ella, atendiendo a que “durante la investigación realizada no se han reunido antecedentes suficientes para fundar una acusación”.
Así las cosas, la pequeña víctima quedó sin protección alguna y la Fiscalía tampoco tomó las medidas para asegurar que el joven querellado se sometiera a tratamientos psicológicos que lo ayudaran a “controlar sus impulsos”.
Cuanto habran coimeado a los fiscales y a los jueces para cerrar la causa de estos V i o l a d o r e s
Ambos primos y de una reconocida familia emoresaria.
Es ahí cuando la justicia da ASCO!!