Abogado de Oliva releva antecedente sobre allanamiento a Comunes: “La orden decía que debía ser en un domicilio particular y con la mayor discreción posible”

“Podría haber un error, pero el error elimina el dolo. No hay entonces una falta formal ni un delito”, sostuvo Juan Carlos Manríquez en La voz de los que sobran respecto a la arista judicial del caso.

En la edición de este miércoles del matinal de La voz de los que sobran conversamos con Juan Carlos Manríquez, abogado de la ex candidata al Senado del Partido Comunes, Karina Oliva.

Respecto al mediático y cuestionado allanamiento a la sede de la colectividad a partir de un operativo con armas de grueso calibre y presencia de la prensa, el abogado advirtió un importante antecedente: “La orden judicial decía que debía ser en un domicilio particular, dentro de un plazo de 24 horas, por determinada policía, y aparece otra. Y lo que también es muy importante es que el juez de la causa había ordenado que se hiciera con la menor perturbación posible, con la mayor discreción posible”, destacó.

En cuanto a las acusaciones sobre la rendición de cuentas de la candidatura a gobernadora de Oliva ante el Servel, Manríquez enfatizó que “está completamente descartada” la posibilidad de que “existan informes triplicados o vendidos más de alguna vez para ocultar gastos”. “Está probado documentalmente que eso no es así”, añadió.

Sobre que se habrían abultado gastos de campaña “a un valor injustificado para personas que habrían trabajado con anterioridad al período”, el jurista sostuvo que “hemos podido establecer que tampoco es así (…) Lo que se hace es estimar y retribuir a aquellos que han dedicado tiempo, trabajo, han dejado de hacer otras cosas, y que han esperado el resultado para ser remunerados más tarde”. “Eso no significa que haya estado pagando trabajos con anterioridad a la época que corresponde”, sostuvo en ese sentido.

Con el objetivo de explicar entonces la denuncia realizada en contra de Oliva y el Partido Comunes, Manríquez indicó que “constatamos que había un error grave, porque se había confundido la primera con la segunda vuelta de la candidatura a la gobernación”.

Y profundizó en ello: “La famosa factura de ese famoso desayuno carísimo, faraónico, técnicamente jamás habría existido, y de hecho ya está establecido que es así, porque no está en la página del Servel, no ha sido auditada, y solo ocurrió en una planilla de Excel que el Servicio pone a disposición. Se había digitado por error, pero nunca fue rendida, y dice relación con la segunda vuelta, no con la primera. En consecuencia, la urgencia para poder abrir esa puerta a la fuerza (de la sede de Comunes), no existió nunca, jamás”.

El jurista fue consultado respecto a la primera versión que entregó Karina Oliva sobre el elevado pago que recibieron sus asesores, donde señaló que tenía que ver con que se había remunerado todo el período trabajado por estos, incluidos aquellos meses no considerados legalmente como dentro de la campaña.

“Probablemente, en ese primer minuto (…) está en una situación de estrés post traumático, tratando de ordenar su mente, y seguramente en ese contexto explicó algo que en ese minuto le parecía que era lo que podía decir, pero ahora a nosotros nos corresponde hacerlo según una bajada técnica”, argumentó.

“Podría haber un error, pero el error elimina el dolo. No hay entonces una falta formal ni un delito. Probablemente, como ustedes ya lo han advertido, quizás una impropiedad en la comunicación, pero para eso son estos procesos complejos, para explicar”, sumó en ese sentido el abogado Juan Carlos Manríquez.