El diario estadounidense The New York Times reveló este lunes (25/3) una serie de videos en los cuales se ve al expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ingresando al edificio de la Embajada de Hungría en Brasilia y quedándose hospedado en esa representación diplomática durante más de dos días.
Las imágenes son referentes a los días 12 y 14 de febrero, que son exactamente los días siguientes a la convocatoria de un acto público en el cual el bolsonarismo llamó a sus seguidores para defenderlo ante las investigaciones judiciales por el intento de golpe de Estado en enero de 2023.
Cabe recordar que en aquel entonces Bolsonaro ya había sido imputado como sospechoso en la causa que tramita en el Supremo Tribunal Federal (STF, máxima instancia del Poder Judicial brasileño), tuvo su residencia allanada por la Policía Federal brasileña, y lo más importante, tuvo que entregar su pasaporte, quedando impedido de dejar el país mientras dure la investigación.
La causa que involucra al expresidente busca aclarar si hubo un plan para realizar un golpe de Estado en Brasil tras las elecciones presidenciales de 2022, cuando Luiz Inácio Lula da Silva venció en las urnas al propio Jair Bolsonaro, que vio frustrada su campaña de reelección y pasó a alegar una supuesta fraude electoral, aunque nunca pudo comprobar esos dichos – la postura, además, es similar a lo que realizó Donald Trump en los Estados Unidos tras perder contra Joe Biden en 2020, en un caso donde también se investiga, por parte de la Justicia norte-americana, un posible intento de golpe.
La ausencia del pasaporte es el elemento que la Justicia ve como más sospechoso en relación a los días en que Bolsonaro estuvo en la Embajada de Hungría, debido a que podría ser considerado como un intento de escapar de una posible sentencia en su contra – considerando que las embajadas son territorio extranjero.
El juez Alexandre de Moraes, que lidera la causa sobre el intento de golpe de Estado, dio a Bolsonaro un plazo de 48 horas para aclarar su periodo en la sede diplomática húngara. Según expertos brasileños, si se considera que hubo intención de evadir a la Justicia, el exmandatario podría tener su prisión preventiva decretada.
La defensa de Bolsonaro alega que el expresidente estuvo en la Embajada de Hungría a convite del primer ministro de ese país, Viktor Orbán, uno de los íconos de la extrema derecha mundial, quien además es un reconocido aliado suyo.
“Durante esos días, estuvo en frecuentes reuniones con autoridades del país amigo, analizando escenarios políticos en ambas regiones”, agregó la nota presentada por los abogados bolsonaristas.
Reacción del gobierno brasileño
Por su parte, el gobierno brasileño, a través del Itamaraty (nombre indígena por el cual se conoce el Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país), convocó al embajador húngaro Miklós Halmai también para prestar aclaraciones sobre el episodio.
Según la prensa local, el diplomático europeo guardó silencio durante los cerca de 20 minutos que duró el encuentro. También se reportó que Halmai mantuvo contacto telefónico con Budapest antes y después de entrar a la reunión.
Por esa razón, Brasilia estudia la posibilidad de expulsarlo del país y cortar relaciones con el gobierno de Orbán.