El Presidente Gabriel Boric visitó La Araucanía, inmersa desde hace tiempo en conflictos entre sectores del pueblo mapuche y colonos de origen europeo y también chileno.
En la actualidad La Araucanía, formada por las provincias de Cautín y de Malleco, está habitada por cerca de un millón de personas y tiene cerca de treinta mil kilómetros cuadrados.
Pero ese territorio fue una tierra de guerra y luego, durante el siglo XIX, también una tierra de aventuras.
En ella se instaló un francés conocido como Orelie Antoine de Tounens. En su país había sido procurador judicial, pero en Chile trató de crear un reino que abarcaría desde La Araucanía hasta la Patagonia.
Para ello tomó contacto con caciques mapuches a quienes convenció de que La Araucanía no debía depender de Chile. El 17 de noviembre de 1860 se declaró rey de ese territorio, al cual declaró como monarquía constitucional.
El gobierno chileno, a cargo del Presidente José Joaquín Pérez, lo apresó y sometió a proceso. Incluso fue interrogado por el intendente de La Araucanía Cornelio Saavedra, quien era el representante del gobierno chileno.
Vuelve a Francia legando la imaginaria corona a su padre.
Retorna a Chile a fines de 1869, pero ya había ocurrido la ocupación de La Araucanía por parte de Chile. El ya mencionado Cornelio Saavedra decidió apresarlo para hacerle cumplir los años de prisión que había determinado un tribunal, pero huyó a Buenos Aires en 1871, regresando a Francia un año después.
Murió en la miseria el 17 de septiembre de 1878, a los 51 años, joven aún.
Un alocado aventurero, pero que amaba al pueblo mapuche y al territorio de La Araucanía.