La mañana de este martes se realizaría la audiencia de preparación de juicio oral del preso de la revuelta Nicolás Piña, la que finalmente fue reagendada para el 22 de marzo próximo. En este escenario, la defensa del llamado “ingeniero” decidió ingresar una solicitud de cambio de medida cautelar, recibiendo un verdadero balde de agua fría como respuesta.
Y es que si bien la solicitud en favor de Piña fue acogida, se exigió para concretar su libertad una caución (garantía) de $40 millones, la que luego fue reducida a $20 millones, lo que -como denuncia Paola Palomera, madre del acusado- se traduciría en dejar una propiedad familiar en prenda.
Cabe recordar que a inicios de enero Palomera debió reunir $8 millones para acceder al mismo beneficio, sin embargo, en aquella ocasión la Corte de Apelaciones de Santiago rechazó el cambio de medida cautelar.
Piña ha permanecido en prisión preventiva en la cárcel Santiago 1 desde el 12 de febrero de 2021, tras ser acusado por un ataque incendiario a un furgón policial en la calle Pío Nono en la capital.
En diálogo con el medio Muros y Resistencia, la mamá del preso político explicó que “tengo que empeñar mi casa, que no es solo mi casa, es la de mi madre, que es sorda e inválida. No piensan cuánto le cuesta a la gente adquirir una casa”.
Por otra parte, Paola enfatizó en un comunicado público que el Ministerio del Interior todavía continúa como uno de los querellantes en este caso, lo que a juicio de Palomera implica que “con esto se desdice la promesa del actual Presidente Gabriel Boric de retirar 139 querellas” por Ley de Seguridad del Estado.
La madre de Nicolás Piña profundizó en lo anterior, señalando que “de hecho, el Ministerio Público se adhirió a todo lo que está pidiendo Fiscalía (…) Es un ensañamiento con Nicolás”.